“Desde 1948 la oligarquía colombiana tiene una enorme deuda histórica con la democracia.”
-¿Quién era Jorge Eliécer Gaitán?
-Jorge Eliécer Gaitán fue una caudillo popular, que encabezó un movimiento de ruptura con el tradicionalismo bipartidista y contra la oligarquía liberal-conservadora. Quiso organizar un partido diferente, que llamó el Unir de amplia conformación y convergencia, pluralista como decimos ahora, pero de raíces populares y democráticas. Fue bloqueado por la propia cúpula oligárquica liberal y por ello intento abrirse campo desde el partido liberal, apoyado en sus sectores democráticos y populares. En 1948 era casi segura su elección como presidente de la república, en 1950, significado la caída del régimen conservador terrorista de Mariano Ospina Pérez, quien inició la violencia en Colombia, la última de las violencias que se prolonga hasta nuestros días. Por eso, lo asesinaron.
-¿Cómo fue el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán hace 62 años?
-Fue el 9 de abril de 1948, a la una de la tarde, cuando Jorge Eliécer Gaitán salía de su oficina de abogado en pleno centro de Bogotá, en la avenida Jiménez con carrera séptima. Gaitán, la noche anterior, había culminado con éxito una audiencia pública en que defendió ante la justicia a un militar acusado de un crimen. Iba acompañado de varios de sus amigos, cuando el sicario, autor material, Juan Rosa Sierra, le disparó varias veces. Los tiros fueron mortales. No se sabe bien si hubo más autores materiales, algunos investigadores así lo aseguran aunque nunca se supo nada más en concreto.
-¿Quién lo asesinó?
-Un sujeto de nombre Juan Roa Sierra, quien fue ajusticiado por la turba enardecida, fue el autor material. Al menos el principal. Si hubo más, nunca se supo quiénes fueron. Los autores intelectuales fueron la oligarquía bipartidista y la CIA. Hay documentos del Departamento de Estado y de la CIA desclasificados, que reconocen que la Embajada de Estados Unidos en Bogotá estaba al tanto del tema. El gobierno conservador de Mariano Ospina Pérez, una dictadura terrorista, es el directo responsable.
¿Por qué los autores intelectuales dieron la orden de asesinar a Gaitán?
-Porque Gaitán era un estorbo para la continuidad de la derecha en el poder. En 1948 era la alternativa popular y democrática, más allá del Partido Liberal. Contaba con el apoyo de la izquierda y de los sectores sociales, aun del Partido Conservador. Era difícil que la ultraderecha falangista, representada en la cúpula conservadora, mantuviera el poder. Estados Unidos necesitaba en Colombia un régimen confiable y sumiso. Con Gaitán era a otro precio. No hay que olvidar, que el 9 de abril de 1948, al inicio de la guerra fría, en Bogotá se realizaba la Conferencia panamericana que le dio vida a la Organización de Estados Americanos bajo la férula de Washington. La campaña anticomunista de Estados Unidos era intensa y necesitaba de América Latina a su alrededor. Un Gobierno democrático en Colombia con Jorge Eliécer Gaitán no le generaba confianza de que así sería. Por eso lo asesinaron. No me cabe la menor duda.
-¿Qué reacción hubo en el pueblo colombiano?
-En Colombia hubo un levantamiento popular. En Bogotá la insurrección popular fue sangrienta. Se le llamó el “Bogotazo”. Las masas enardecidas arremetieron contra todo lo que tuvieron por delante y se dirigieron a tomarse el palacio presidencial. Faltó el liderazgo, quien organizara a esa turba, la izquierda no logró hacerlo y el Partido Liberal renunció a ello y la cúpula prefirió pactar con el gobierno conservador, traicionando a sus bases que querían el poder para castigar a los asesinos de Gaitán. Fidel Castro, quien era en la época un dirigente estudiantil, estaba en Colombia y participó de la protesta del “Bogotazo”. Ha dicho con claridad que hubo una insurrección, una revolución, pero faltó la conducción, la organización capaz de darle forma y contenido y de evitar el caos y la anarquía que fue lo que ocurrió. La dirección liberal oligárquica traicionó a las masas. Darío Echandía dijo “¿el poder pa’qué?” y con esa frase lapidaria frenó el ímpetu de las masas, las neutralizó y facilitó la represión oficial. Echandía y otros liberales ingresaron al gabinete de Unidad Nacional. Las oligarquías liberal y conservadora siempre que han visto amenazados sus intereses de clase y económicos se unen para eliminar cualquier alternativa democrática y popular. Es la realidad.
-¿Qué pasó después?
-La oligarquía se impuso a sangre y fuego. Ocurrió lo de siempre, la clase dominante se impuso mediante la violencia. Es la constante hasta nuestros días. No fue la primera vez ni la última. La historia está llena de este tipo de acontecimientos, aunque el “Bogotazo” fue especial por la trascendencia y el nivel de la confrontación. Fue una revolución que fracasó, una revolución frustrada, por la traición de los jefes liberales y la incapacidad de la izquierda revolucionaria de asumir el liderazgo y orientarla.
-¿La historia de Colombia se partió en dos con la muerte de Gaitán?
-De alguna manera sí, porque el nueve de abril abrió una nueva etapa de la violencia en Colombia, que se prolonga hasta nuestros días. El conflicto actual se incubó por decirlo de alguna manera antes del nueve de abril de 1948, pero se incremento con el magnicidio de Gaitán y la asfixia democrática y social que impuso la oligarquía colombiana con posterioridad. El Frente Nacional bipartidista fue excluyente, como también el exterminio de la izquierda y en especial de la Unión Patriótica en la década de los años ochenta del siglo pasado.
-¿O sea que el actual conflicto tiene que ver con el 9 de abril?
-Claro que sí. El asesinato de Gaitán está en el nudo de las contradicciones entre el latifundismo, fuerza predominante oligárquica y las masas campesinas que exigían la reforma agraria. Los terrateniente y latifundistas organizaron bandas armadas (paramilitares se llaman hoy) con el apoyo de la Fuerza Pública estatal, para liquidar al movimiento agrario y asesinar a sus líderes. Es la primera razón de la resistencia armada campesina, núcleos originales del posterior movimiento insurgente guerrillero. Posteriormente fue retroalimentada con la política social oligárquica, la democracia restringida, el terrorismo de Estado y la instauración de un régimen autoritario y plutocrático. El asesinato de Gaitán no fue un hecho aislado de este mar picado de la lucha de clases en Colombia, ni de las pretensiones hegemónicas y anticomunistas del gobierno de los Estados Unidos. Por esta misma razón, este conflicto no tiene solución militar posible. Es política y negociada y depende esta solución de los cambios políticos, económicos y sociales. Desde 1948 la oligarquía colombiana tiene una enorme deuda histórica con la democracia.
Elecciones en Bolivia: ¿Otro Zárate Willca?-¿Quién era Jorge Eliécer Gaitán?
-Jorge Eliécer Gaitán fue una caudillo popular, que encabezó un movimiento de ruptura con el tradicionalismo bipartidista y contra la oligarquía liberal-conservadora. Quiso organizar un partido diferente, que llamó el Unir de amplia conformación y convergencia, pluralista como decimos ahora, pero de raíces populares y democráticas. Fue bloqueado por la propia cúpula oligárquica liberal y por ello intento abrirse campo desde el partido liberal, apoyado en sus sectores democráticos y populares. En 1948 era casi segura su elección como presidente de la república, en 1950, significado la caída del régimen conservador terrorista de Mariano Ospina Pérez, quien inició la violencia en Colombia, la última de las violencias que se prolonga hasta nuestros días. Por eso, lo asesinaron.
-¿Cómo fue el asesinato de Jorge Eliécer Gaitán hace 62 años?
-Fue el 9 de abril de 1948, a la una de la tarde, cuando Jorge Eliécer Gaitán salía de su oficina de abogado en pleno centro de Bogotá, en la avenida Jiménez con carrera séptima. Gaitán, la noche anterior, había culminado con éxito una audiencia pública en que defendió ante la justicia a un militar acusado de un crimen. Iba acompañado de varios de sus amigos, cuando el sicario, autor material, Juan Rosa Sierra, le disparó varias veces. Los tiros fueron mortales. No se sabe bien si hubo más autores materiales, algunos investigadores así lo aseguran aunque nunca se supo nada más en concreto.
-¿Quién lo asesinó?
-Un sujeto de nombre Juan Roa Sierra, quien fue ajusticiado por la turba enardecida, fue el autor material. Al menos el principal. Si hubo más, nunca se supo quiénes fueron. Los autores intelectuales fueron la oligarquía bipartidista y la CIA. Hay documentos del Departamento de Estado y de la CIA desclasificados, que reconocen que la Embajada de Estados Unidos en Bogotá estaba al tanto del tema. El gobierno conservador de Mariano Ospina Pérez, una dictadura terrorista, es el directo responsable.
¿Por qué los autores intelectuales dieron la orden de asesinar a Gaitán?
-Porque Gaitán era un estorbo para la continuidad de la derecha en el poder. En 1948 era la alternativa popular y democrática, más allá del Partido Liberal. Contaba con el apoyo de la izquierda y de los sectores sociales, aun del Partido Conservador. Era difícil que la ultraderecha falangista, representada en la cúpula conservadora, mantuviera el poder. Estados Unidos necesitaba en Colombia un régimen confiable y sumiso. Con Gaitán era a otro precio. No hay que olvidar, que el 9 de abril de 1948, al inicio de la guerra fría, en Bogotá se realizaba la Conferencia panamericana que le dio vida a la Organización de Estados Americanos bajo la férula de Washington. La campaña anticomunista de Estados Unidos era intensa y necesitaba de América Latina a su alrededor. Un Gobierno democrático en Colombia con Jorge Eliécer Gaitán no le generaba confianza de que así sería. Por eso lo asesinaron. No me cabe la menor duda.
-¿Qué reacción hubo en el pueblo colombiano?
-En Colombia hubo un levantamiento popular. En Bogotá la insurrección popular fue sangrienta. Se le llamó el “Bogotazo”. Las masas enardecidas arremetieron contra todo lo que tuvieron por delante y se dirigieron a tomarse el palacio presidencial. Faltó el liderazgo, quien organizara a esa turba, la izquierda no logró hacerlo y el Partido Liberal renunció a ello y la cúpula prefirió pactar con el gobierno conservador, traicionando a sus bases que querían el poder para castigar a los asesinos de Gaitán. Fidel Castro, quien era en la época un dirigente estudiantil, estaba en Colombia y participó de la protesta del “Bogotazo”. Ha dicho con claridad que hubo una insurrección, una revolución, pero faltó la conducción, la organización capaz de darle forma y contenido y de evitar el caos y la anarquía que fue lo que ocurrió. La dirección liberal oligárquica traicionó a las masas. Darío Echandía dijo “¿el poder pa’qué?” y con esa frase lapidaria frenó el ímpetu de las masas, las neutralizó y facilitó la represión oficial. Echandía y otros liberales ingresaron al gabinete de Unidad Nacional. Las oligarquías liberal y conservadora siempre que han visto amenazados sus intereses de clase y económicos se unen para eliminar cualquier alternativa democrática y popular. Es la realidad.
-¿Qué pasó después?
-La oligarquía se impuso a sangre y fuego. Ocurrió lo de siempre, la clase dominante se impuso mediante la violencia. Es la constante hasta nuestros días. No fue la primera vez ni la última. La historia está llena de este tipo de acontecimientos, aunque el “Bogotazo” fue especial por la trascendencia y el nivel de la confrontación. Fue una revolución que fracasó, una revolución frustrada, por la traición de los jefes liberales y la incapacidad de la izquierda revolucionaria de asumir el liderazgo y orientarla.
-¿La historia de Colombia se partió en dos con la muerte de Gaitán?
-De alguna manera sí, porque el nueve de abril abrió una nueva etapa de la violencia en Colombia, que se prolonga hasta nuestros días. El conflicto actual se incubó por decirlo de alguna manera antes del nueve de abril de 1948, pero se incremento con el magnicidio de Gaitán y la asfixia democrática y social que impuso la oligarquía colombiana con posterioridad. El Frente Nacional bipartidista fue excluyente, como también el exterminio de la izquierda y en especial de la Unión Patriótica en la década de los años ochenta del siglo pasado.
-¿O sea que el actual conflicto tiene que ver con el 9 de abril?
-Claro que sí. El asesinato de Gaitán está en el nudo de las contradicciones entre el latifundismo, fuerza predominante oligárquica y las masas campesinas que exigían la reforma agraria. Los terrateniente y latifundistas organizaron bandas armadas (paramilitares se llaman hoy) con el apoyo de la Fuerza Pública estatal, para liquidar al movimiento agrario y asesinar a sus líderes. Es la primera razón de la resistencia armada campesina, núcleos originales del posterior movimiento insurgente guerrillero. Posteriormente fue retroalimentada con la política social oligárquica, la democracia restringida, el terrorismo de Estado y la instauración de un régimen autoritario y plutocrático. El asesinato de Gaitán no fue un hecho aislado de este mar picado de la lucha de clases en Colombia, ni de las pretensiones hegemónicas y anticomunistas del gobierno de los Estados Unidos. Por esta misma razón, este conflicto no tiene solución militar posible. Es política y negociada y depende esta solución de los cambios políticos, económicos y sociales. Desde 1948 la oligarquía colombiana tiene una enorme deuda histórica con la democracia.
Las recientes elecciones para los niveles intermedios y locales para gobernadores y alcaldes mostró a diferencias de las anteriores algunos rasgos distintivos, a saber: Que no se repitió la aplanadora de Movimiento al Socialismo (MAS) del 64% de la elección pasada en favor del actual mandatario Evo Morales. Que las más importantes urbes han revertido su voto al oficialismo. El caso mas flagrante es la de la Ciudad de La Paz, sede de los poderes... Siga..
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