Fiscalía encuentra indicios de que el DAS tenía ‘chuzado’ a José Miguel Vivanco, director de Human Rights Wach
Autor : Daniel Valero
El grupo G-3 del DAS también tenía interceptado de manera ilegal al director de la Human Rights Wach, José Manuel Vivanco, según lo indican los folios de varios procesos que tiene la Fiscalía por el escándalo de las ‘chuzadas’, conocidos hoy por CM&.
La información se encuentra en el folio del proceso que se sigue por el escándalo de las ‘chuzadas’ contra el ex subdirector del DAS, José Miguel Narváez, ya que en el radicado 129511 se lee lo siguiente:
"Realizar monitoreo a José Miguel Vivanco, de la Human Rights Wach, y definir actividades de inteligencia ofensiva".
La investigación de la Fiscalía, conocida por este noticiero, ha encontrado actas de reuniones del G-3, en las que presuntamente se programaban las interceptaciones.
"Basta observar las actas de algunas reuniones del grupo que fueron implementadas (...), entre ellas la 001 del 8 de marzo de 2005, en la que se evidencia la forma y circunstancias en que venía cumpliendo su labor el G-3".
El organismo acusador advierte que los integrantes del grupo, creado de manera ilegal al interior del DAS, estaban enterados de lo que se hacía.
"Todos los participantes (del G-3) sabían de su creación, finalidad, blancos, labores de inteligencia, interceptación telefónica, seguimientos, e incluso la llamada inteligencia ofensiva".
La información se encuentra en el folio del proceso que se sigue por el escándalo de las ‘chuzadas’ contra el ex subdirector del DAS, José Miguel Narváez, ya que en el radicado 129511 se lee lo siguiente:
"Realizar monitoreo a José Miguel Vivanco, de la Human Rights Wach, y definir actividades de inteligencia ofensiva".
La investigación de la Fiscalía, conocida por este noticiero, ha encontrado actas de reuniones del G-3, en las que presuntamente se programaban las interceptaciones.
"Basta observar las actas de algunas reuniones del grupo que fueron implementadas (...), entre ellas la 001 del 8 de marzo de 2005, en la que se evidencia la forma y circunstancias en que venía cumpliendo su labor el G-3".
El organismo acusador advierte que los integrantes del grupo, creado de manera ilegal al interior del DAS, estaban enterados de lo que se hacía.
"Todos los participantes (del G-3) sabían de su creación, finalidad, blancos, labores de inteligencia, interceptación telefónica, seguimientos, e incluso la llamada inteligencia ofensiva".
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