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| Delegados de las FARC- EP |
Luego de seis meses de conversaciones exploratorias, el Gobierno de Colombia y las FARC firmaron a finales de agosto en La Habana el “Acuerdo General para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera” que consta de una agenda de cinco puntos.
La reunión preparatoria para afinar asuntos logísticos con miras a los diálogos de paz entre las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) y el Gobierno colombiano comenzó este martes en La Habana.
Representantes de ambas partes definen, a puertas cerradas, aspectos técnicos para instalar las pláticas formales que deben iniciarse el próximo día 15 en La Habana.
Este encuentro estaba previsto inicialmente para ayer lunes, según lo acordado el pasado 18 de octubre en Oslo, capital de Noruega, quedó pospuesto para este martes , confirmaron las guerrillas a Prensa Latina.
Habían convenido en la nación europea realizar una cita preparatoria el día 5 de noviembre, previa a las pláticas formales que deben comenzar el próximo día 15 en La Habana.
El viernes último, las FARC-EP ratificaron a Prensa Latina su compromiso con el cumplimiento de la agenda para este diálogo con el que se busca un cambio para Colombia y cuya base, de acuerdo con las FARC, es la erradicación de las causas que originaron el conflicto armado.
Luego de seis meses de conversaciones exploratorias, el Gobierno de Colombia y las FARC firmaron a finales de agosto en La Habana el “Acuerdo General para la terminación del conflicto y la construcción de una paz estable y duradera” que consta de una agenda de cinco puntos.
El primero se refiere al mayor acceso a la tierra, a la distribución más equitativa de la prosperidad. Un segundo, a la garantía para el ejercicio de la oposición política y la participación ciudadana.
El tercero sería el fin mismo del conflicto armado que incluye la dejación de las armas y la integración de las guerrillas a la vida civil.
La lucha contra el narcotráfico sería el cuarto y el quinto, se relaciona con los derechos de las víctimas que implica emprender un ejercicio de esclarecimiento de lo ocurrido durante los casi 50 años de conflicto armado.
Las FARC-EP insisten en que todos los colombianos deben ser parte de este nuevo esfuerzo por alcanzar la paz en el país.
Cuba, sede permanente del diálogo, y Noruega, son garantes del proceso, mientras que Chile y Venezuela, fungen como acompañantes.
Prensa Latina
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