martes, 21 de mayo de 2013

Un candidato que nos enorgullece

Rodrigo López Oviedo

En un acto de singular importancia, celebrado en Bogotá el sábado y domingo pasados, fue exaltado a la condición de candidato al Senado un tolimense ejemplar, demócrata sin mácula y revolucionario de mil batallas. Estamos hablando de Carlos Lozano Guillén, el abogado ibaguereño vocero de la Marcha Patriótica, miembro destacado de Colombianas y Colombianos por la Paz, escritor de más nueve libros y coautor de 12 más, director del semanario Voz y miembro del Comité Ejecutivo Central del Partido Comunista, entre muchos otros logros, posiciones y dignidades.


Carlos Lozano Guillén ha sido un revolucionario que se ha destacado en cuantas actividades ha emprendido, sin que mancha alguna de su parte haya podido empañarlas. Ello le ha permitido hacerse portador de la Orden de Caballero de la Legión de Honor, que es la más alta condecoración que puede conferir la república francesa, además de muchas otras distinciones internacionales y nacionales, otorgadas en reconocimiento a su ardua labor por la paz, por la democracia, por la justicia social y por el cambio de las caducas estructuras económicas y políticas que tan aberrantemente amplían la brecha entre ricos y pobres en nuestro país.

En uno de los aspectos en que más se ha destacado nuestro hoy candidato al Senado es en su lucha por la solución política del conflicto social y armado. Podría decirse que ha participado en todos los procesos de diálogo que se han dado en nuestro país, incluidos los que se tuvieron con la desaparecida Coordinadora Guerrillera. Tan destacado activismo le permitió hacer parte de la Comisión de Notables que tan acertadas luces ofreció al proceso del Caguán.

Esto habla bien de lo importante que resulta tener en el Senado a un hombre que, como Carlos Lozano, posee los pergaminos necesarios para desarrollar el papel que mejor se pueda jugar en la coyuntura presente, tan necesitada de que salgan bien los diálogos de La Habana, y hacerlo con la honestidad y la ética que siempre lo ha caracterizado.


Pero también en el campo de la unidad, Carlos Lozano ha luchado con denuedo. En ello anda desde cuando comenzó la dura brega por unir a la izquierda, lo cual nos remonta a la época del MRL. Por eso, pese a ser una de las personalidades más amenazadas del país, se propone recorrer pueblos y ciudades en busca de aliados que le permitan a nuestro pueblo cambiar la correlación de fuerzas actualmente existente en el Congreso y procurar los cambios que tanto reclaman las inmensas mayorías.


En fin, en Carlos Lozano Guillén tenemos un candidato de lujo por quien debemos jugárnosla entera en este próximo debate electoral.

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