Marcha por las calles de Bogotá e imágenes de la minería. Foto:Oscar Paciencia
Desde de las 10 de la mañana del 1° de agosto, comenzaron a recorrer las
calles de Bogotá centenares de jóvenes provenientes de varias
localidades de la ciudad, sindicalistas de la central Unitaria de
Trabajadores (Cut), entre ellos, los del sector petrolero miembros de la
Unión Sindical Obrera (Uso) y de la empresas da Acueducto y
Alcantarillado de Bogotá; ambientalistas y artistas. Todas estas
personas hacían parte de la marcha carnaval con la que se hablaba al
país sobre la necesidad de frenar la política minero-energética del
presidente Santos Calderón.
La protesta señalaba el daño que esa política causa al medio ambiente.
En días pasados, Manuel Rodríguez Becerra, primer ministro de
Medioambiente de Colombia en 1993, comentaba en el mismo sentido el
anuncio que hizo el presidente Santos en la cumbre conocida como Río+20,
cuando declaró un área estratégica minera de 17,6 millones de hectáreas
para garantizar la minería sostenible en el este de la Amazonia, región
de altísima biodiversidad en Colombia y una de las mejor conservadas
del país: «[…] bajo la palabrería de ‘la minería sostenible’ se acaba
ocultando el hecho de que con esta ‘reserva minera’ se estaría
decretando el principio del fin de la riqueza biológica y cultural de la
Amazonia oriental colombiana, así como de las otras áreas incluidas en
esta declaratoria, ubicadas en el Chocó y en la Orinoquia» (“Bye, bye’ a
la Amazonia”, El Tiempo, 14 de julio de 2012).
La locomotora minera y sus vagones Foto:Colombia Informa
En otro punto cardinal del país, en la parte más septentrional, las
comunidades se han unido frente a ls pretensión de una empresa
explotadora de Carbón, El Cerrejón, que quiere desviar un río para
terminar de extrae el carbón que lleva 40 años usufructuando. En el
departamento de La Guajira, marcharon más de 3.000 personas en la
jornada de este primero de agosto.
Casos similares se presentan en muchas regiones del país donde la
llamada«locomotora del progreso»amenaza la vida de comunidades y su
medio ambiente. De eso dan cuenta informaciones de los últimos dos años
sobre las represas Hidroituango, Hidrosogamoso, El Quimbo; los proyectos
mineros de Angostura, en el páramo de Santurbán; La Colosa, en el
municipio de Cajamarca y otros en el municipio de Marmato; la
construcción del Oleoducto Bicentenario y la situación de violencia que
viven la comunidades campesinas, afrodescendientes e indígenas del
Cauca.
También hubo movilizaciones en el departamento de Chocó, en la ciudad de
Villavicencio y en todas las sedes de la Empresa Colombiana de
Petróleos, Ecopetrol, donde la Unión Sindical Obrera organizó diversos
actos y actividades.
Los artistas animan la marcha carnaval. Foto:Colombia Informa
Un día después de la marcha carnaval, el periódico de la Universidad
Nacional de Colombia publicó «Explotación minera contra investigación
científica», artículo en el que presenta cifras contundentes: «En los
últimos 15 años se han otorgado 46 licencias científicas, mientras en 8
años se firmaron 7.800 contratos mineros». Agrega que «durante los
gobiernos de César Gaviria, Ernesto Samper y Andrés Pastrana (12 años)
fueron otorgadas 1.700 licencias o títulos mineros. En los 8 años de
gobierno de Álvaro Uribe se concedieron 7.800, a un ritmo de 762,5 por
año, es decir, 2,08 cada día. Un crecimiento de 459%».
Rodolfo Vecino, presidente de la USO. Foto:Colombia Informa
Colombia Informa entrevistó en el recorrido a Rodolfo Vecino, presidente
nacional de la Uso, quien destacó que este es el comienzo de un proceso
de concientización y movilización que poco a poco levantará un gran
movimiento de muchos sectores del pueblo colombiano que logrará parar
esta máquina de muerte, la locomotora minero-energética de Santos.
Santandereanos marcharon en contra de la "locomotora minera"
Santandereanos marcharon en contra de la "locomotora minera". (Foto: MILTON VELOSA/VANGUARDIA LIBERAL)
Cerca de 200 personas partieron del Parque del Agua para protestar en
contra de la política minera del Gobierno Santos. La movilización, que
se realiza también en otras ciudades del país, fue promovida por la
Confederación Nacional de Mineros de Colombia y en Santander, por la
Federación Santandereana de Pequeños y Medianos Mineros de Santander.
Estudiantes de Floridablanca, en contra de megaproyectos mineros
Los niños se manifestaron en el parque central, para pedir por un mejor futuro.
(Foto: Brayner R. García Ardila/VANGUARDIA LIBERAL)
Varios jóvenes de diferentes centros
educativos del municipio se manifestaron en contra de los megaproyectos
mineros, viales y turísticos que pondrían en riesgo el ecosistema de la
región.
El Comité para la defensa y la vida
fueron los organizadores de la protesta, en esta actividad los niños
mediante pancartas y dibujos dieron su voz de apoyo al cuidado del agua y
del medio ambiente.
“Los megaproyectos que más nos
preocupan, es la doble calzada a la vía a Cúcuta, debido a que están
contaminando el río Frío con los desechos y lodo que tiran desde la
obra, también nos inquieta el proyecto del Cerro del Santísimo, que al
parecer va construirse en la reserva forestal de La Judía, y por su
puesto aún más nos alerta es la explotación minera que quieren las
multinacionales hacer en el Páramo de Santurbán”, afirmó José Ángel
Mejía, ambientalista.
La actividad de los estudiantes fue
parte de la campaña en toda la nación, que desarrollaron ambientalistas,
sindicatos, Iglesia Católica y la misma comunidad para no permitir que
los megaproyectos destruyan el rico ecosistema del país.
A esta hora la marcha avanza por la carrera 33, luego tomará la calle36,
se hará una parada en la calle 36 con carrera 27, donde se ubican las
sedes de algunas empresas mineras que operan en la región. En ese punto
también se unirán manifestantes que parten de la Universidad Industrial
de Santander, UIS.
Posteriormente la marcha seguirá por la calle 36 hasta llegar a la Plazoleta Cívica Luis Carlos Galán Sarmiento.
En la marcha hay organizaciones del Área Metropolitana de Bucaramanga,
pero también asociaciones de Mogotes, Sabana de Torres, San Gil y
Rionegro. También asistieron dirigentes de la Unión Sindical Obrera,
USO, de la Central Unitaria de Trabajadores, CUT, líderes del Comité en
Defensa del Agua y del Páramo de Santurbán, entre otras organizaciones.
"Estamos denunciando y rechazando la política del actual gobierno que
consiste en darle plenas gabelas a las empresas multinacionales en
detrimento de la industria nacional minera, y sobre todo de persecusión
contra la minería tradicional y artesanal de nuestro país", declaró Luis
Alfredo Muñoz, representante legal de Fesamin.
Marcha contra la megaminería se realizó en Cajamarca, Tolima
Marcha contra la megaminería se realizó en Cajamarca, Tolima (vista parcial de la marcha. foto nelosi)
Por Nelson Lombana Silva.
Dos mil personas marcharon por las principales calles de la población de
Cajamarca, Tolima, ayer, con el fin de rechazar la política anti
ambientalista de la locomotora energético – minero del presidente Juan
Manuel Santos Calderón. Los marchantes centraron su inconformismo con la
presencia en la zona de la transnacional Anglo Gold Ashanti. Exigieron
que se marche no solo de este municipio sino del país, por cuanto sus
intereses imperialistas buscan apoderarse de los recursos naturales, en
este caso de la mina de oro La Colosa y dejar las cordilleras
convertidas en desierto, perdiendo Cajamarca su vocación agrícola que la
hace “la despensa agrícola del Tolima”.
La marcha se caracterizó por la presencia activa de la juventud, la
presencia de la mujer, la combatividad de ésta, dentro de un ambiente de
disciplina y pacíficamente. Los organizadores presentaron un derecho de
petición al alcalde Luis Evelio Gómez, para que explique qué
compromisos tiene con la transnacional, pero el mandatario en una
actitud pusilánime no se hizo presente en la plaza principal, se refugió
en su despacho, a criterio de muchos por miedo a las determinaciones
que tome la Anglo Gold Ashanti, lo cual indica, al parecer, su extremo
grado de compromiso con ésta. También se leyó el comunicado de los
obispos, comunicado que expresa la necesidad de defender el medio
ambiente.
La actividad se hizo en el marco de la convocatoria nacional de jornada
de resistencia contra la minería a cielo abierto que viene impulsando el
mandatario de los colombianos. Fue una protesta vistosa, activa y
propositiva que llama a la sensibilidad de todos los colombianos sobre
la necesidad de preservar los recursos naturales como la flora, la fauna
y el agua.
Consignas como: “La peor lucha es la que no se da”, “Hay otras
alternativas para alimentar a nuestro país”, “Anglo Gold Ashanti genera
800 empleos y la agricultura 9000”, “Los campesinos, los estudiantes van
defendiendo el río Anaime”, “Pueblo de mina, pueblo de ruina”, “Anglo
Gold Ashanti, fuera del país”, se corearon durante la movilización que
duró tres horas, aproximadamente.
Todas las expresiones de la izquierda colombiana participaron
activamente de la jornada, comenzando por las banderas del Partido
Comunista, la Marcha Patriótica, El Polo Democrático Alternativo, la
Minga Indígena el Congreso de los pueblos, la coordinadora de
movimientos sociales y políticos, ambientalistas y demócratas.
Opiniones
Renzo Alexander García, miembro comité ambiental en defensa de la vida:
“Yo creo que la actividad en cierta medida es todo un éxito. Estamos
movilizando más de 1.500 personas, estamos en Cajamarca, en el epicentro
del conflicto minero del centro de Colombia, con el proyecto más
importante de minería a cielo abierto en el caso del oro en La Colosa.
Creo que en cierta manera este pueblo está despertando y las comunidades
campesinas está diciendo que van a defender su territorio”.
Olga López Castro: “Es muy alegre ver la cantidad de gente que ha
caminado por las calles de Cajamarca diciendo: Pueblo de mina, pueblo de
ruina, alerta, alerta la lucha campesina en defensa de la vida. Es
alegría ver niños, viejos, ver personas de edades intermedias, todo
mundo desesperado gritando no a la explotación minera de cielo abierto,
no a las multinacionales que vienen a saquear una hermosa región como
ésta, que es un monumento a la vida, rica en comida, rica en montañas.
No entendemos cómo el gobierno nacional irresponsablemente en el 2.007,
Ingeominas entrega una región tan rica que tiene el nombre de la
“despensa agrícola de Colombia” para convertirla entonces en una región
desértica, donde 19 mil habitantes de este municipio, de los cuales 9
mil trabajan activamente en ella, cuando la minería solo genera en el
momento 800 o 600 empleos. Y la mayoría de estos empleos es solo para
conquistar el pueblo”.
Un campesino, señaló: “La lucha también es contra el imperialismo que
quiere ganarnos la batalla no solo contra el pueblo cajamarcunos sino
contra el pueblo colombiano. Es necesario que nosotros en Cajamarca
tengamos conciencia de nuestras generaciones futuras, no es posible que
en un aparente momento de ofertas e intereses económicos para los que
ahora estamos, vayamos a entregar el futuro de las nuevas generaciones.
No es posible que coloquemos a los campesinos contra la pared, en estos
momentos están sufriendo el costo más alto de vida de toda su historia
con el cuento de la mina La Colosa. Los arriendos hoy son imposibles por
el mismo motivo, los mismo la prostitución y la violencia. Paremos esto
ahora, después será demasiado tarde”.
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