Por Nil Nikandrov
El escándalo en torno al “equipo científico proveniente de Estados Unidos” estalló a pesar de los esfuerzos de la embajada norteamericana por echarle tierra. En el mes de junio del 2012 un equipo de especialistas de alrededor de 50 personas ingresó al país, ostensiblemente para estudiar los efectos adversos de las grandes altitudes en el ser humano y su aptitud para la rápida recuperación de su capacidad de combate. Con el objeto de no llamar mucho la atención, los norteamericanos emplearon visas de turistas y cruzaron los controles fronterizos en pequeños grupos. Un grupo de estos especialistas entró por Yungas y el otro grupo por las laderas del Monte Chacaltaya. Por otra parte, senderos “turísticos” han sido trazados en las áreas fronterizas con Perú y Chile.
El escándalo en torno al “equipo científico proveniente de Estados Unidos” estalló a pesar de los esfuerzos de la embajada norteamericana por echarle tierra. En el mes de junio del 2012 un equipo de especialistas de alrededor de 50 personas ingresó al país, ostensiblemente para estudiar los efectos adversos de las grandes altitudes en el ser humano y su aptitud para la rápida recuperación de su capacidad de combate. Con el objeto de no llamar mucho la atención, los norteamericanos emplearon visas de turistas y cruzaron los controles fronterizos en pequeños grupos. Un grupo de estos especialistas entró por Yungas y el otro grupo por las laderas del Monte Chacaltaya. Por otra parte, senderos “turísticos” han sido trazados en las áreas fronterizas con Perú y Chile.